“La
Matemática precisa
estudiar los números, sus propiedades y transformaciones.
En esa parte ella
toma el nombre de
Aritmética.
Conocidos los números, es posible aplicarlos a la evaluación de magnitudes que
varían, o que son desconocidas, pero que se presentan expresadas por medio de
relaciones y fórmulas. Tenemos así el
Álgebra.
Los valores que medimos en el campo de la realidad son representados por
cuerpos materiales o por símbolos; en cualquier caso, esos cuerpos o esos
símbolos están dotados por tres atributos:
forma,
tamaño y posición. Es necesario, pues, estudiar estos tres atributos; ese
estudio constituye el objeto de la
Geometría.
Estudia, además, la Matemática, las leyes que rigen los movimientos y las
fuerzas, leyes que aparecen en la admirable ciencia que se denomina
Mecánica.
La Matemática pone todos sus
recursos al servicio de una ciencia que eleva el alma y engrandece al hombre.
Esa ciencia es la
Astronomía.
Hablan
algunos de las Ciencias Matemáticas, como si la Aritmética, el Álgebra y la
Geometría fuesen partes enteramente distintas. No es así, sin embargo. Todas se
auxilian mutuamente, apoyándose unas en las otras, y, en ciertos puntos, se
confunden. Hay una ciencia única, la Matemática, la cual nadie se puede jactar
de conocer, porque sus conocimientos son, por su naturaleza, infinitos, y de la
cual todos hablan, sobre todo los que más la ignoran.”
Párrafos del libro: “El hombre que calculaba”, “Malba Tahan”,
Capitulo 11